martes, enero 24, 2006
Speak Slowly
Señoras y señores, vengo llegando de unas vacaciones forzadas por mi persona, para alejarme de todo lo que me estaba sucediendo en este principio de año.
Conocí a un tipo, medianamente alto, cabello castaño claro, ojos color miel, de piel blanquecina que a causa del sol se había tornado rojiza jaivezca mientras yo vitrineaba en una coqueta tienda de ropa en la ciudad de La Serena (a todo esto pude ver una falda de gasa verde super linda, pero ese no es el asunto). El sujeto este se acerco a mi y me dijo algo que no entendí muy bien... algo como "its veri nais"... mmmmmm... La imagen del sujeto hablandome en jerigonza me dio vueltas en la cabeza al que podía ver por el reflejo del espejo no me llamo la atención, pero cuando nuevamente insistió en hablarme no podía esquivarlo. Me hablaba en un acento Spanglishezco. Humildemente le hacía gestos con la cara, por que la verdad es que no me interesaba conversar con el, mas me interesaba conversar conmigo misma, en un intento desesperado por entenderme un poco mas, pero al final de 5 incomodos minutos no tuve mas remedio de dirijirle la palabra... "hablas español?". Saco un diccionario de esos de bolsillo (de marca Oxford pude apreciar) y me repetia "si, un pocou". AJA!!!. Me deje llevar por el juego. Conversarmos lo que quedaba de la mañana y luego me invito a almorzar. Me llamo la atención que hiciera eso, la verdad es que nunca me había pasado (creía que eso solo pasaba en los capítulos de Sex and the City). Primero me resulto un poco incomodo, pues mi intención de salir de vacaciones sola era con la finalidad de alejarme de todas las personas y solo dedicarle tiempo a ellas cuando yo supiera que lo podia hacer, y frente a esta forzada invitación solo tuve que decir "no gracias". Pero el insistió... y varias veces. Como estoy en un plan de no ser tan cortante, y a decir verdad que por cansancio, le dije ok ok ok!!!! mientras mi cabeza no dejaba de pensar en muchas cosas y el sujeto este seguía hablando con su acento forzado al Spanglish. Me dije "bueno... 1 hora de almuerzo y chao", y esa hora resulto ser 1 y media y despues 2. Lo mas gracioso es que entre tanta conversación traducida al español el tipo me comenzó a agradar, amable, simpático, caballero. Hasta que pum!!!... mi desconfiada mente empezó a trabajar "y si es un malandrín, o un violador que me esta engatuzando para llevarme a su cueva oscura y malévola y violar la santidad de mi cuerpo!" (novelezco cierto?) y recordé mis preciadas clases de ingles en el Instituto Chileno Norteamericano de Cultura y mi fallida pasantía de 1 mes en gringolandia. "soo, why are you in Chile? Why here and no other Place?". El tipo quedo como en un shock, peor que un coma etílico. "do you understand me?, or i have to speak slowly?". Y nada.
De un principio supe que era solo un Chilenito lindo de ojos miel forzando su acento. Que gringo en este tiempo te habla con terminaciones "U" (poquitou, lentou, bonitou). No tuvo otra opción que decirme la verdad, puesto que lo amenace que si no me decía que pasaba le iba a tirar la comida encima, y como en un primer momento no me hizo caso, tome el pan con mantequilla mas cercano a mi y se lo lance.
El agua corría por mi garganta mientras me contaba su historia Chilensis, de que era solo un estudiante y que siempre ha sido tímido y había inventado esta personalidad gringa, aprovechandose de sus risados cabellos castaños y sus ojitos miel.
No me dio rabia, mas bien pena... y envidia. El se conocía lo bastante como para saber que su personalidad no era muy entradora. Esa era la cosa... el "si se conocía", y tambien se conocía lo bastante como para crear un personaje que es el opuesto a el y que funcionara, aun que también de mi trabajo para que funcionase. Si no le hubiese hablando, el gringuito hubiera quedado ahí.
Al final de mi 2 horas de "falso amor" me dijo su nombre real: Danilo, y terminamos la charla con un beso en la mejilla, y entre los perdones que me ofrecían sus ojos que me hablaban sinceramente se hizo digno de recibir una servilleta manchada con salsa golf con una dirección de un hotel.
Aun que antes de que me fuera a buscar (entre las 15 y las 23 horas), tuve tiempo de darme un super baño de tina y leer poemas escritos por mi hermana, un regalo que escondio cuando salí casi arrancando de Antofagasta, para olvidarme de todo y comenzar de nuevo. Y el primer poema que salía, titulado "No Eres Mas", la primera frase "No importa donde vayas, siempre te acompañaré, en un intento obsesivo por estar frente a tí", me hizo entender que no es olvidar y comenzar de nuevo, es amenizar la pena y la rabia y hacerla compatible con mi diario vivir. No importa donde vaya, el recuerdo de los malos ratos siempre iban a estar. No tenía que vencerlos, tenía que unirme a ellos.
El gringo amenizo mi tarde, pues me rei de el todo el camino hacia el hotel, lo nervioso que debe haber estado mientras hablaba como un gringo y lo nervioso que se debe haber puesto cuando le hable en ingles, a punto de hacerse pichi en los pantalones.

El poema termina con "No importa que seas, ni cuantas maldades hayas hecho, ya no eres mas viento en mis antenas, ahora eres parte de mi historia en esta tierra".

Lindo no??